Philodendron Cuidados

Los philodendron son fascinantes. Este género comprende una gran variedad de especies de diferente porte y estilo de hojas que en su hábitat natural crecen en el sotobosque de las zonas tropicales de centro y sur de américa. En la naturaleza pueden alcanzar tamaños enormes y algunas especies son trepadoras y otras reptadoras. ¿Alucinante no crees? En casa las cuidamos generalmente como plantas colgantes. En cambio, a los philodendron trepadores, si les proporcionamos un tutor bien hidratado, sus hojas se harán cada vez más y más grandes.

De fácil cuidado gracias a su flexibilidad con la luz y su baja demanda de riegos, los philodendron son de las plantas tropicales más resistentes. Aunque no nos engañemos: las especies más singulares quizás tienen ciertas dificultades en lo que respecta a sus cuidados. 

Philodendron Riego

En general, este género resiste a los despistes. Es preferible no regar hasta notar su sustrato seco y, si tienes dudas, es preferible esperar unos tres días más a regar. Algunos philodendron como el scandens o el micans te indican su falta de riego cuando sus hojas se enrrollan y se ablandan.

Una de las maneras más seguras de regar los philodendron es utilizar autorriego de terracota. Así el agua se filtrará por los poros progresivamente, sin afectar a las raíces directamente.

Philodendron humedad & temperatura

El philodendron agradece una humedad alta. No obstante, se pueden adaptar a ambientes más secos sin mostrar signos muy evidentes. Es poco frecuente ver bordes secos. En cambio, cabe destacar que los philodendron agradecen que los pulvericemos durante las épocas más secas y calurosas.

En lo que respecta a la temperatura, lo más recomendable son las temperaturas templadas imitando su lugar de origen, especialmente si cuentan con el riego y humedad suficientes. Por debajo de los 10ºC se empiezan a resentir.

Fertilizantes orgánicos ideales para los philodendron

Los philodendron necesitan una buena proporción de materia orgánica frecuente, sobre todo si lo cultivamos en casa y en maceta. Como nutrición, podemos añadir food o humus de lombriz líquido durante el riego cada 15 días.

Sustrato para philodendron

Los philodendron generalmente se asientan bien en muchos tipos de sustratos, pero a continuación os damos alguna receta que os puede servir:

30% de corteza de pino

40% fibra de coco

20% de perlita

10% humus de lombriz

Otro sustrato rico en materia orgánica es utilizar este sustrato listo para usar mezclado con humus de lombriz.

Luz

Prefieren espacios con luz indirecta brillante. Sin embargo, se adapta con facilidad a la iluminación de baja intensidad. Evita los rayos de sol directos ya que pueden provocar quemaduras en sus hojas.

Trasplantes

El philodendron es una planta que no necesita estar en una maceta amplia. Realiza los trasplantes al inicio de la temporada de crecimiento (primavera) o cuando las raíces te lo pidan a gritos, ocupando todo el espacio disponible de la maceta.

Plagas

Las plagas más comunes en las alocasias son la araña roja y los trips. Para combatirlas, nada mejor que usar jabón potásico durante el tratamiento, pulverizando la planta preferiblemente al amanecer o atardecer.

Sabías que

Los philodendron son tóxicos para mascotas si se ingieren, por lo que recomendamos mantenerlas en zonas alejadas de nuestros peques y peludos. 

Por otro lado y como comentábamos al inicio, este género comprende una gran variedad de especies, muchas de ellas distintas entre sí. El philodendron neon, el micans, brasil o scandens son plantas colgantes de hojas pequeñas en forma de corazón, muy similares al pothos. Otras especies son mucho más difíciles de encontrar y cuidar como el philodendron pink princess o el philodendron gloriosum plantas “raras” para los coleccionistas de plantas más exigentes.

Deseamos que disfrutes de la experiencia de cuidar philodendron, una de las plantas más alucinantes y originales que podemos cultivar en casa.