Tipos de Orquídeas

A continuación, os presentamos un resumen sobre algunos de los tipos más destacados de orquídeas:

1. Orquídeas Epífitas: Muchas orquídeas son epífitas, lo que significa que crecen sobre otras plantas, utilizando sus raíces para sujetarse a la corteza de los árboles. No son parásitas, ya que obtienen nutrientes del aire y de la lluvia.
2. Orquídeas Terrestres: A diferencia de las epífitas, las orquídeas terrestres crecen en el suelo. Sus raíces se desarrollan en el sustrato y obtienen nutrientes de la descomposición de materia orgánica.
3. Orquídeas Saprófitas: Estas orquídeas obtienen sus nutrientes de la descomposición de materia orgánica en descomposición, como hojas caídas. No tienen clorofila y no realizan la fotosíntesis de manera eficiente.
4. Orquídeas Monopodiales: Estas orquídeas crecen verticalmente y desarrollan un solo tallo principal. Las hojas emergen de este tallo y pueden permanecer activas durante varios años.
5. Orquídeas Simpodiales: Se caracterizan por un crecimiento horizontal y una estructura más ramificada. Los nuevos brotes surgen lateralmente y forman nuevos bulbos o pseudobulbos.
6. Orquídeas Cattleya: Son conocidas por sus flores grandes, vistosas y fragantes. Son populares en la horticultura y se utilizan comúnmente en arreglos florales.
7. Orquídeas Phalaenopsis: También llamadas “orquídeas mariposa”, son apreciadas por su facilidad de cuidado y una prolongada floración. Tienen flores elegantes y pueden adaptarse a ambientes domésticos.
8. Orquídeas Dendrobium: Con una gran diversidad de especies, estas orquídeas presentan flores variadas en forma y color. Algunas son epífitas, mientras que otras son terrestres.
9. Orquídeas Oncidium: Conocidas como “dama danzante”, estas orquídeas producen racimos de flores pequeñas y a menudo tienen un aspecto exótico.
10. Orquídeas Vanda: Son orquídeas epífitas que no tienen pseudobulbos y se caracterizan por sus flores vibrantes y duraderas.