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Luz indirecta brillante
Riego moderado
Adoran el clima tropical entre 20ºC y 25ºC
Araña roja y trips
Pur Plant » Guía cuidado de plantas » Cómo cuidar las plantas Maranta
Las marantas son originarias de las zonas tropicales y sombrías de Brasil y Perú, de ahí que puedan desarrollarse en espacios con poca luz, aunque prefieren lugares con una buena iluminación indirecta. Es muy popular como planta de interior pues no crece en exceso, es pet-friendly y resistente a plagas y despistes. Tal y como sucede con sus primas las calatheas, se consideran las plantas de la oración por su peculiar movimiento de hojas. Se pliegan durante el día y levantan sus hojas por la noche. Además de ser un movimiento bello, es un indicador de que algo pasa: si observas que tu maranta deja de moverse, es muy probable que necesite riego.
De fácil cuidado gracias a su flexibilidad con la luz, las marantas son plantas tropicales resistentes.
Recomendamos dejar secar al menos la mitad superior entre riegos. Una buena manera de saber cuándo regar una maranta es comprobar que su maceta esta ligera, no pesa. Ellas son muy expresivas y cuando empiezan a tener sed dejan de mover sus hojas cuando se hace de noche y su tallo y peciolos pierden sutilmente la altura y turgencia.
Una de las maneras más seguras de regar las marantas es utilizar autorriego de terracota. Así el agua se filtrará por los poros progresivamente, sin afectar a las raíces directamente.
Las marantas son originarias de las zonas tropicales y sombrías de Brasil y Perú, de ahí que puedan desarrollarse en espacios con poca luz, aunque prefieren lugares con una buena iluminación indirecta. Es muy popular como planta de interior pues no crece en exceso, es pet-friendly y resistente a plagas y despistes. Tal y como sucede con sus primas las calatheas, se consideran las plantas de la oración por su peculiar movimiento de hojas. Se pliegan durante el día y levantan sus hojas por la noche. Además de ser un movimiento bello, es un indicador de que algo pasa: si observas que tu maranta deja de moverse, es muy probable que necesite riego.
De fácil cuidado gracias a su flexibilidad con la luz, las marantas son plantas tropicales resistentes.
Como hemos comentado anteriormente, las marantas crecen felices en temperaturas entre los 20º y 25ºC. Por debajo de los 10ºC en invierno es posible que el frío provoque hojas secas o enrrolladas, como quemadas. Por el contrario, pueden soportar temperaturas cálidas siempre que se les garantice un alto nivel de humedad.
Una de las dudas más frecuentes en el cuidado de las marantas es el grado de humedad. Para poder desarrollarse de manera saludable necesitan una humedad ambiente media/alta superior al 50%. En cambio, sus hojas aterciopeladas es preferible no pulverizarlas.
En este artículo te contamos con detalle todo sobre la pulverización si es un tema que te interesa.
Las marantas son muy exigentes en cuanto a nutrientes se refiere, por lo que si las tenemos en casa y en macetas necesitan que les suministremos comidita rica extra. Imitando su hábitat natural, suelos frondosos ricos en materia orgánica, podemos añadir unas 3/4 partes del gotero del plant food durante el riego cada 15 días aproximadamente. Si lo prefieres, puedes optar por añadir humus de lombriz líquido también durante el riego, pues este se trata de uno de los mejores fertilizantes orgánicos que existen.
Las marantas prefieren espacios pequeños y apretados para crecer. Trasplántala una vez al año cuando notes que los riegos son demasiado recurrentes. Una buena receta de sustrato sería esta:
25% turba rubia
10% fibra de coco
10% humus de lombriz
5% biochar
25% Perlita
25% Vermiculita
Puedes adquirir este mismo sustrato rico en materia orgánica como en el vídeo indicado con estos 3 materiales: sustrato orgánico para plantas de interior listo para usar, perlita y vermiculita:
luz marantas
Las marantas no son exigentes en luminosidad, de hecho se adaptan bien a espacios sombríos como hemos comentado anteriormente. En cambio, deberás tener en cuenta que si no reciben la cantidad de luz necesaria el color de sus hojas puede variar, pero en principio esto no afectará su salud.
Existen varias formas de reproducir una Maranta, pero la forma más común es mediante la propagación de esquejes. Aquí hay unos pasos generales para propagar una Maranta a través de esquejes:
Es importante tener en cuenta que la propagación de esquejes es un proceso que requiere paciencia y cuidado, y no siempre se tiene éxito. Para ayudarte, te recomendamos usar este kit perfecto para su propagación:
mejores macetas para marantas
La maranta amabilis crecerá feliz en una mini maceta, en cambio, te recomendamos usar macetas de autorriego o macetas medianas para el resto de marantas
Sabías que…
Las marantas son 100% petfriendly, resisten bien en espacios sin mucha luz, son fáciles de cuidar y lo más sorprendente, sus hojas tienen mucho movimiento. Consideradas como “las plantas que hablan”, se dice que al atardecer sus hojas tienen un sonido especial si las escuchas en una habitación silenciosa. ¿No te parece increíble? Te animamos a comprobarlo, empieza tu aventura con una de estas bellezas: