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Si estás aquí es porque probablemente tienes problemas con tu monstera ya sea por hojas marrones, amarillas o por alguna plaga. Si tu monstera o monsteras parecen no estar pasando por su mejor momento, tan solo deberás prestar atención a los siguientes consejos.
La reina de las señales. Las hojas amarillas son muy comunes en las monsteras y suele darse por exceso de riego. Si crees que este puede ser tu caso, reduce de inmediato el riego y no vuelvas a darle agua hasta que veas su sustrato completamente seco.
Otras causas de hojas amarillas en monstera puede ser la falta de hierro, un mal drenaje en su sustrato, falta de luz o que esté siendo atacada. Revisa si alguno de estos motivos puede ser tu caso para solucionarlo.
Te damos algunos consejos:
Puede que tu monstera tenga las hojas marrones por los siguientes motivos:
Por esta razón, las Monstera variegadas suelen crecer más lentamente que las Monstera completamente verdes, ya que dependen únicamente de las partes verdes para producir energía. También es importante darles las condiciones adecuadas de luz (mucha luz indirecta brillante) para maximizar la eficiencia fotosintética en las partes verdes y ayudar a compensar las limitaciones de las zonas variegadas.
Podríamos decir que la principal causa de bordes y hojas quemadas en las monsteras variegadas es la falta de luz. Las variegadas, en sus zonas blancas, son más sensibles a la falta de luz ya que tiene dificultades para realizar la fotosíntesis por la falta de clorofila en las hojas. Para corregirlo, te recomendamos ubicar la monstera cerca de una ventana con luz indirecta muy brillante y, en el caso de que tengas temperaturas cálidas en el exterior, agradecerá crecer fuera siempre que no reciba sol directo.
Otras posibles causas es un riego inadecuado o una exposición solar directa.
Tanto el exceso como la falta de agua pueden causar problemas. El riego excesivo puede llevar a la pudrición de las raíces, mientras que la falta de agua puede hacer que las hojas se sequen y los bordes se quemen. Es crucial mantener un equilibrio, asegurándose de que la tierra esté húmeda pero no empapada, y permitir que la capa superior del suelo se seque entre riegos. Para corregirlo, te recomendamos probar con el método de riego de nuestros autporriegos. Gracias a la capilaridad de la terracota, mantendrá la planta bien hidratada y de manera progresiva, sin excesos ni sequías.
Este problema puede darse por los siguientes motivos:
¿Cómo solucionarlo?
Las raíces podridas es posible que se hayan producido por exceso de agua. Si este es el caso, es difícil solucionarlo. Si todavía nos queda un poco de esperanza podemos cambiar nuestra monstera de sustrato y trasplantarla a un sustrato con buen drenaje rico en materia orgánica.
Las quemaduras producidas por el sol tienen fácil solución, cambia de ubicación la monstera y listo. Eso sí, tendrás que retirar las hojas dañadas para dejar crecer hojas nuevas y sanas.
Si en cambio tu monstera necesita comida, un poco de food durante el riego cada 15 días y biopellet en el sustrato les irá bien.
Por último, si antes de que sufran alguna enfermedad provocada por hongos, será necesario utilizar algún fungicida ecológico.
Aunque parezca sorprendente, las gotitas de agua que aparecen en las hojas de la monstera es un fenómeno conocido como gutación. Esto se produce cuando la planta recibe las condiciones ideales para absorber minerales y agua y, durante la noche transpira, dando como resultado una “monstera felizmente llorona”. En este vídeo os compartimos la alucinante gutación de una monstera thai constellation.
Que no cunda el pánico. Si tu monstera presenta las hojas enrrolladas como en las de esta imagen, se trata de hojas nuevas. Al crecer nacen muy enrrolladas y con un tono verde más clarito. ¡Es algo natural! Y no puede dar mayor alegría que ver a tu monstera crecer feliz.
En cambio, hay otros motivos de hojas enrrolladas no tan positivos…
¿Cómo solucionarlo?
Si detectamos que nuestra monstera sufre sequedad, falta de riego, baja humedad y exceso de calor podemos reubicarla, usar autorriegos como método de riego y aumentar la humedad con un humidificador o, una opción más económica, ponerla en nuestro baño. ¡Adora las duchas! También aconsejamos pulverizar sus hojas con frecuencia.
Los agujeros conocidos técnicamente como fenestraciones suelen aparecer una vez la planta madura, pues las nuevas hojas no tienen agujeros.
En cambio, si observamos que sus hojas maduras no tienen agujeritos, entonces nos está indicando que no está pasando por su mejor momento. Para ponerla feliz, hay que darle los mimos que necesita.
Aunque su gran defecto es que las monsteras son plantas tóxicas para mascotas y humanos, son altamente resistentes a plagas. En cambio, podríamos decir que su enemigo común son los trips.
Si crees que puede ser tu caso, te recomendamos usar algún insecticida orgánico para su tratamiento. No te pierdas este vídeo en el que te lo contamos con detalle:
Si tienes más dudas sobre los problemas con la monstera, aquí te dejamos este artículo sobre enfermedades y síntomas. ¡Esperamos te sirva de ayuda!
